La morosidad inmobiliaria se
multiplicó por diez desde principios de 2008
Desde
que comenzó la crisis, en 2008, las cuentas del sector financiero
español se han visto seriamente dañadas por la morosidad de las
empresas inmobiliarias, que ha pasado del 1,98 % registrado en el primer
trimestre de ese año al 20,9 % con que cerró 2011.
Según los últimos
datos publicados por el Banco de España, de los 298.267 millones de
euros que las entidades financieras españolas tenían concedidos a cierre
del año pasado a empresas inmobiliarias, 62.366 millones eran morosos,
cifra que creció en 4.789 millones en un solo trimestre.
De hecho, entre
julio y septiembre de 2011, la mora de las empresas inmobiliarias se
situó en el 18,97 %, ya que había 57.577 millones de euros impagados
de una cartera de 303.506 millones.
En cuanto a la evolución
interanual, la morosidad inmobiliaria aumentó en siete puntos
básicos, desde el 13,98 % que registró en el último trimestre de 2010 al
20,9 % de un año después, para una cartera crediticia
inmobiliaria que entonces sumaba 315.782 millones, con lo que se redujo
en ese periodo en 17.605 millones.