COBRADOR, SACATE EL DEUDOR QUE LLEVAS DENTRO
Autor: Eduardo Buero
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Está claro que en cobranzas competimos con los demás cobradores del mismo deudor, todos lo acosan, todos lo atosigan, todos lo persiguen, hay alguno que cobra, los otros no.
Debemos ser nosotros los que cobremos, debemos ser egoístas y cobrar primero, debemos interesarnos en que a nosotros nos pague, y a los demás que los siga manteniendo pendientes, pero a mí que me pague.
Tenemos que estar de acuerdo que esto se consigue, además de con la insistencia y la persistencia en el reclamo, brindando buen trato pero firme, poniendo límites, dando ideas sobre cómo solucionar su problema y ofreciendo alternativas posibles de arreglos.
Pero más allá de la gestión, la gran competencia es la interna, y no hablo de nuestros compañeros de gestión, hablo de la competencia interior que “sufre” el cobrador al hacer su trabajo.
Es habitual que el cobrador se sienta así sobretodo el principiante, o aunque no lo sea simplemente que trabaje de cobrador como obligación o que no sienta la cobranza como un desafío personal, como una meta a cumplir, como el orgullo de poder cobrar las deudas que mantienen nuestros clientes morosos.
Y digo sufre porque estos empleados que hacen cobranzas sienten vergüenza ajena por reclamar a un semejante supuestamente en problemas “que pague con lo que no tiene” y otros argumentos similares.
O que le da pena reclamar a alguien que está peor que su familia y partiendo de la base que el propio cobrador no anda muy bien o no estuvo al día en sus cuentas con anterioridad a encontrar este trabajo.
Y allí está el núcleo del problema, el cobrador piensa como deudor antes de cómo cobrador y entonces su gestión es suave, light, inconsistente, provocando pérdida de tiempo, pérdida de oportunidades, pérdida de dinero a la empresa.
Capacitemos y motivemos a nuestros cobradores para que sientan la cobranza y la responsabilidad que nos transfirieron de recuperar el dinero de la empresa que nos contrata y así dejen de actuar en forma equivocada.
Por eso digo “Che cobrador, sacate ese deudor que llevas adentro” y actuá con la responsabilidad y la eficiencia que se espera de vos.
Eduardo Buero
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