La pesadilla de la casa propia
Créditos UVA: un duro informe del CEPA pone al descubierto el “fracaso” de
la política habitacional
23 de mayo de 2019 · 12:00 hs.
El Centro de Economía Política Argentina elaboró un documento donde
analizó la situación de los hipotecados que, al cumplirse 3 años del
lanzamiento de los préstamos, acumulan un incremento del 141,78%, al
pasar del valor inicial de 14,05 a 33,97.
El 31 de marzo pasado se cumplieron tres años desde que Federico
Sturzenegger lanzó los créditos hipotecarios UVA como alternativa a
largo plazo en Argentina. En tres años, acumularon un incremento del
141,78%, al pasar del valor inicial de 14,05 a 33,97.
Sin dudas, la gran devaluación del 2018 fue a variable central que
motorizó la presión inflacionaria que terminó por aumentar los
precios hasta lograr el pico más malto desde el año 1991. La
inflación minorista anual se ubicó en el 47,6%, pero al no acompañar
los salarios a esa inflación, derivó en una pérdida del poder
adquisitivo promedio del 14,32% en términos interanuales para el
conjunto de trabajadoras y trabajadores registrados.
Así, entonces y consecuentemente, los préstamos a largo plazo
ajustados por inflación, sin cláusulas que limiten ese ajuste, ponen
a los deudores en una situación de vulnerabilidad. Más aún, cuando
el salario evoluciona muy por debajo de ese ajuste, como ocurrió en
2016, en 2018 y en lo que va del 2019.
El Centro de economía Política Argentina (CEPA)
realizó un riguroso y exhaustivo informe donde señala que “los
préstamos hipotecarios UVA, tal como fueron concebidos por el
gobierno, fracasaron como alternativa para el acceso a la vivienda”,
lo que “deja al desnudo además la ausencia de una política
habitacional, más allá de estos préstamos hipotecarios”.
Es que, fundamentalmente, el problema principal
para los deudores radica es la ausencia de cláusulas que limiten el
ajuste por inflación cuando los ingresos evolucionan por debajo,
como viene ocurriendo desde el segundo trimestre del año pasado. En
este sentido, el CEPA recuerda que “las supuestas ventajas para los
tomadores resultaron no ser tales: no hubo un proceso de
desinflación como fuera prometido. Y tampoco es cierto que los
flujos de dinero que deben emplear los tomadores resulten semejantes
a los que estarían destinando si siguieran alquilando”.
Otro factor fundamental es que el ajuste del capital también es
causa del aumento mensual del valor de la cuota, “toda vez que los
intereses que se abonan son sobre el saldo deudor: a mayor saldo
deudor, mayores intereses”.
El trabajo del CEPA marca que el nivel de ingresos que se requiere
acreditar equivale a 2,21 veces el ingreso individual medio del
decil más rico de la población. Y detalla que “en sólo 37 meses
(siendo que se trata de un préstamo a 240 meses) la cuota del
préstamo hipotecario UVA pasó de representar el 48% de la cuota de
la versión tradicional a representar un 119%. En el mes de enero de
este año, en la cuota 33, ya superaba la cuota que ese mismo capital
tenía en la modalidad en pesos a tasa fija de la línea “Nación Tu
Casa””.
Además, se grafica lo más preocupante para los
tenedores de créditos: “la UVA sube por el ascensor y los salarios
por la escalera”. En este sentido, se explica que partiendo de una
relación cuota-ingreso inicial de 25% para el financiamiento
propuesto en este trabajo y tomando en cuenta que la cuota al
momento del otorgamiento era de 5.984 pesos, esa misma cuota, en
febrero de 2019 (último dato disponible para CVS y remuneración
promedio de los trabajadores registrados del sector privado) ya
ascendía a 13.647 pesos.
Sin embargo, inmersos en la crisis económica argentina la evolución
de los salarios no siguió la misma progresión. “Se observa un
incremento del peso de la cuota en relación con el ingreso en todos
los casos: en el caso del estatal de SiNEP o del trabajador de UOM,
pasó del 25% al 29%, en el caso del promedio de salarios de
trabajadores registrados llega al 26,5% y respecto de la variación
de salarios, 27,1%”
Respecto a la deuda de capital, que al estar expresada en UVA
también se actualiza, “se evidencia un incremento sustancial en
pesos corrientes. Desde el otorgamiento del préstamo hipotecario en
abril de 2016 hasta abril de 2019, el saldo de deuda de capital más
que se duplicó, pasando del 1.031.800 pesos otorgado a 2.327.907
pesos, una diferencia de 1.296.107 pesos (126% nominal)”.
Por último, se analiza la evolución del mercado de préstamos
hipotecarios UVA. Es que desde su surgimiento en 2016 hasta fin de
abril de 2019, en el sistema bancario se otorgaron préstamos
hipotecarios UVA por un total de 150.172,95 millones de pesos,
equivalentes a 6.714,25 millones de UVA y a U$S 7.050,42 millones.
Hasta diciembre de 2017 se observa crecimiento exponencial de los
montos otorgados en líneas de préstamos hipotecarios UVA, llegando a
alcanzar para ese último mes, más de $ 11.465 millones en todo el
sistema bancario local. Sin embargo, para los meses de enero y
febrero del 2018, se experimentó una importante caída en torno a los
$ 2 mil millones (siendo $ 9.497 millones para enero y $ 9.442
millones para febrero), seguida de una significativa recuperación
que conduce al máximo de la serie para el mes de marzo de 2018,
otorgándose un monto de $ 13.937 millones (equivalentes a U$S 678,49
millones / 622,86 millones de UVA).
Según el informe, a partir de ese mes se inicia una continua caída
de los montos otorgados, pasando en diciembre de 2018 a
otorgarse$2.692 millones (equivalentes a U$S 69,38 millones / 88,36
millones de UVA), lo que representa una caída del 81% en relación a
los montos otorgados en pesos en marzo de ese año y del 90% en
relación a su equivalencia en dólares estadounidenses.