Viviendas sociales: 30% de
beneficiarios adeuda $ 130 millones por cuotas impagas
Hay 7 mil morosos en gestión administrativa y prejudicial. Lanzaron nuevas
intimaciones. Los titulares que están al día quieren cancelar el plan por los
aumentos que se aplicarán con el Fovicor.
22/08/2012 08:01 | Daniel Alonso |
Viviendas sociales: 30% de beneficiarios adeuda $ 130 millones por cuotas
impagas
Cada tanto, el centro de atención de la Dirección General de Viviendas se llena
de gente. Y es sintomático, porque ocurre días después de las intimaciones
periódicas que realiza el organismo a los beneficiarios que deben cuotas (ver
Radiografía en PDF).
Lo curioso es que en las últimas semanas, eran más los vecinos cumplidores que
los atrasados. La causa: averiguar cómo cancelar sus planes, después de
enterarse que con el regreso del Fondo para la Vivienda de Córdoba (Fovicor)
habrá un fuerte aumento en las cuotas, que además se actualizarán de aquí en
adelante.
“Hubo una avalancha de trámites y creo que esto recién empieza”, comentó un
funcionario que sigue de cerca los planes habitacionales implementados desde la
Provincia.
Cuando anticipó el proyecto para la vuelta del Fovicor, el jefe de Gabinete,
Oscar González, aseguró que la sustentabilidad de ese fondo iba a depender de la
eficiencia en el cobro de las cuotas, además del ajuste en los montos. Y
advirtió que la mayoría de los beneficiarios paga hoy cifras muy bajas.
Según los datos oficiales, el 90 por ciento de los adjudicatarios de planes de
vivienda encarados por la Provincia abona menos de 250 pesos por mes.
Y en ese marco, hay unos 14 mil titulares con diversos grados de atraso que, en
conjunto, implica una deuda de alrededor de 130 millones de pesos.
En junio pasado, de acuerdo con la Dirección General de Estadísticas y Censo
provincial, el costo del metro cuadrado para una casa tipo de 75,7 metros
cubiertos, con dos dormitorios, fue de 3.271 pesos.
Si se toma esa referencia, la deuda global alcanzaría hoy para levantar 720
viviendas sociales de 55 metros cuadrados, a razón de 180 mil pesos de costo de
construcción por cada unidad edificada.
No es poco si se tiene en cuenta que el último grupo de casas que encaró el
Gobierno comprende unas 800 en la Capital y algo más de 200 en Río Cuarto,
correspondientes al fallido plan Hogar Clase Media.
Radiografía. ¿Cómo es el universo actual de viviendas sociales? La radiografía
previa al regreso del Fovicor indica que hay alrededor de 48 mil casas con
facturación activa. El 55 por ciento está en la ciudad de Córdoba y el resto, en
el interior.
De ese total, unos 34 mil titulares están al día con sus pagos y, en el peor de
los casos, experimentan atrasos que no superan dos cuotas, siempre de acuerdo
con las estadísticas de la Provincia.
El resto está en el planeta de la morosidad. Son alrededor de 14 mil
beneficiarios, la mitad de los cuales ya se encuentra en gestión administrativa
o prejudicial, a raíz del atraso.
A principios de año, a este último grupo lo integraban alrededor de 9.500, pero
el proceso de reinserción continua le permitió a la Provincia volver a cobrarle
a unos 1.500 que habían dejado de pagar por diversas causas.
La otra mitad está compuesta por deudores de tres cuotas en adelante, aunque
también aquí ingresan los que tienen nuevos acuerdos de pago para regularizar la
situación.
Por lo tanto, casi 30 por ciento se encuentra hoy con diferentes grados de
atraso, de los cuales 7 mil están en la categoría de incobrables o con
pronóstico reservado.
Y como la mayoría de ese grupo no escrituró la vivienda que recibió, no hay
demasiados caminos. O se sigue “gestionando el cobro” o se procede al desalojo,
una medida de altísimo costo político. Por eso el Gobierno apunta ahora a una
nueva instancia, con la posible tercerización del cobro.
Emisión. La Dirección Provincia de Vivienda (ex IPV) emite las boletas en forma
trimestral, lo que equivale a una facturación mensual de 7,5 millones de pesos.
Pero al final de la rueda, cobra el 75 por ciento.
En esa dependencia están en análisis unos 1.200 casos de adjudicatarios que
dicen estar imposibilitados de pagar, lo que implica una evaluación
socioeconómica y habitacional de esas familias.
Y advierten, por ejemplo, que pese a estar en condiciones de escriturar, esos
vecinos esquivan el trámite, que es gratuito por la creación de un programa
específico.
De las 38 mil unidades aptas para tener sus papeles en regla, hay 16 mil que no
iniciaron el trámite. Aunque en este punto las causas pueden ser múltiples y no
necesariamente relacionadas con una maniobra para evitar la pérdida de la
unidad.
En la actualidad, la cuota más alta es de 1.195 pesos y corresponde a los
primeros beneficiarios del ex Hogar Clase Media que acaban de recibir sus
viviendas, aunque todavía no empezaron a pagar porque tienen un período de
gracia. Pero todavía hay planes que datan de mediados de la década de 1980.
